Marcelo Freixo, presidente de Embratur

“Queremos convertir la Amazonia en un destino turístico global”.

Hablamos con el presidente del organismo de promoción internacional de Brasil, cuando visitó Buenos Aires en el marco de la Feria Internacional de Turismo, a fines de septiembre de 2024.

¿Qué novedades traen para contarnos sobre Brasil en esta nueva edición de FIT?

Estamos muy felices de participar una vez más en FIT, especialmente porque Brasil es el país homenajeado este año. Esto nos da un gran destaque en un momento muy importante para nosotros. Argentina es el país que más emite turistas hacia Brasil, representando hoy el 30% de los turistas internacionales que nos visitan. Esa cifra muestra lo significativa que es la presencia de los argentinos en nuestro país.

En esta edición de FIT, Brasil cuenta con una presencia muy fuerte. En nuestro stand de Embratur, contamos con 34 co-expositores, además de otros destinos brasileños que también participan. Esta es la mayor presencia que Brasil ha tenido en la historia de FIT, y con ello, reafirmamos la importancia de la relación turística entre Brasil y Argentina. Para nosotros, el turismo es fundamental no solo como generador de empleo y renta, sino también como una herramienta para mejorar la economía y las personas. Creemos que el turismo contribuye a que el mundo sea un lugar mejor.

Argentina es el principal emisor de turistas hacia Brasil. Con una relación tan consolidada, ¿ven todavía margen de crecimiento?

Sí, definitivamente. A pesar de que Argentina ya representa una gran cantidad de turistas para Brasil, creemos que todavía podemos crecer. Un ejemplo de esto es que en los próximos tres meses vamos a ofrecer 820.000 asientos de vuelos entre Brasil y Argentina, superando la cifra récord de 2019, que era de 770.000 asientos. Si incrementamos la oferta de vuelos, es porque esperamos que más personas viajen, así que hay un espacio para crecer, aunque ya tengamos un número alto de visitas.

Cuando pensamos en Brasil, la primera imagen que nos viene es la playa. ¿Qué esfuerzos están haciendo para diversificar la oferta turística?

Es cierto que cuando se habla de Brasil, inmediatamente se piensa en sol y playa. Y claro, eso es algo que seguimos promoviendo porque tenemos una diversidad enorme en nuestras costas. Florianópolis, por ejemplo, es completamente diferente de Búzios, y este último es distinto de Salvador. Tenemos playas con agua caliente, con agua fría, para surf, para kitesurf, para buceo, y hasta playas más desérticas. Pero también es cierto que queremos mostrar más allá de eso.

Hoy en día, Brasil ofrece una enorme diversidad cerca de cualquier playa, como cultura, gastronomía y naturaleza. La gastronomía, por ejemplo, es distinta en cada región: lo que comes en Bahía no es lo mismo que en Minas Gerais o en Río de Janeiro. La cultura también varía muchísimo, y queremos que los argentinos y otros turistas conozcan todo lo que Brasil tiene para ofrecer. Nos interesa no solo atraer más turistas, sino también que se queden más tiempo y disfruten de esta diversidad.

¿Cuánto tiempo promedio permanece un argentino en Brasil y cuál sería el tiempo ideal para ustedes?

Actualmente, los turistas argentinos permanecen en Brasil una media de 10 días, lo cual es un buen promedio. Sin embargo, si lo comparamos con otros mercados más lejanos, como el norteamericano o el europeo, esos turistas suelen quedarse entre 20 y 25 días. Eso tiene sentido debido a la distancia y la planificación que implica un viaje desde esos lugares.

¿Con el regreso del presidente Lula, han cambiado los enfoques de promoción internacional del país?

Sí, el presidente Lula lo dejó claro con su frase “Brasil ha vuelto”. En este primer año de su gobierno, el foco ha estado en reestablecer las relaciones de Brasil con el mundo. Hemos visto visitas importantes, como la del presidente francés Emmanuel Macron, después de años de ausencia de altos mandatarios europeos en Brasil. Esto nos ha permitido recuperar nuestra presencia internacional, lo que también impacta en el turismo.

Por ejemplo, Francia es el país europeo que más turistas envía a Brasil, y después de la llegada de Lula, el número de visitantes franceses ha crecido considerablemente. En eventos internacionales como los Juegos Olímpicos de París, donde tuvimos la “Casa Brasil”, recibimos a 4.000 personas por día. Este tipo de iniciativas ayudan a reforzar la imagen de Brasil en el exterior.

Además, Lula me encomendó una misión especial: convertir a la Amazonía en un destino turístico global. No es solo un lugar, debe ser un destino que la gente quiera conocer. Mañana, en FIT, presentaremos una experiencia en 3D de la Amazonía, donde los visitantes podrán recorrer el río Tapajós guiados por una indígena.

¿Por qué es tan importante posicionar la Amazonía como destino turístico?

Porque las personas solo cuidan lo que conocen. El turismo en la Amazonía puede ser una herramienta clave para su preservación. Si queremos combatir las actividades ilegales en la región, necesitamos promover actividades legales, como el turismo de base comunitaria y de experiencia. Conocer la Amazonía no es solo un viaje físico, es un viaje interior, que conecta a las personas con el planeta. Por eso, la Amazonía es una prioridad para nosotros y será uno de los destinos que promoveremos tanto en Argentina como en otros países.

¿Este crecimiento en el número de vuelos incluye también una mayor conectividad con la región amazónica?

Ese es uno de nuestros grandes desafíos, por la geografía misma. Hoy en día tenemos 23 rutas fijas desde Argentina hacia Brasil, con 286 vuelos semanales que conectan cinco ciudades argentinas con 12 brasileñas. Si bien es cierto que llegar a la Amazonía no es tan sencillo, ya hemos logrado conexiones importantes, como un vuelo de TAP hacia Manaus, y estamos en conversaciones para aumentar las opciones.

Además, con la celebración de la COP30 en noviembre del próximo año, creemos que uno de los legados será una mayor conectividad y posibilidad de visitar la Amazonía, no solo para eventos, sino como un destino turístico consolidado.

Recientemente lanzaron el Plan Nacional de Turismo 2024-2027 con la ambición de posicionarse como el principal destino de Sudamérica. ¿Cómo impactará esto en la relación con Argentina?

Nuestro plan hasta 2027 está basado en la inteligencia de datos, lo que nos permite diseñar campañas adaptadas a cada mercado. Por ejemplo, la campaña que lanzamos en Europa estuvo enfocada en los deportes. En América Latina, lanzamos una nueva campaña cuyo lema es que “Brasil es indescriptible”. Queremos que los argentinos sigan visitando nuestras playas, pero también estamos promoviendo otros destinos como Gramado y la Serra Gaúcha.

Nuestra idea es mostrar que Brasil ofrece una experiencia única que no se puede describir con palabras. Queremos seguir atrayendo a los argentinos, pero también a turistas de otros países de la región, como Chile, Paraguay y Perú, para convertirnos en el principal destino turístico de Sudamérica.